El Río Grío, que surca las provincias de Teruel y Zaragoza, se presenta como un oasis para los aficionados a la pesca en Aragón. Sus aguas cristalinas, su entorno natural incomparable y la variedad de especies que habitan en él lo convierten en un destino ideal para disfrutar de una jornada de pesca inolvidable.
Permisos y licencias
Para pescar en el Río Grío, es necesario contar con la licencia de pesca de Aragón en vigor. Esta licencia se puede obtener de forma online o presencialmente en las oficinas del Departamento de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón.
Zonas Prohibidas
Existen algunos cotos y tramos vedados en el Río Grío, por lo que es importante consultar la normativa vigente antes de iniciar la jornada de pesca. Se puede obtener información detallada sobre las zonas prohibidas en la página web del Gobierno de Aragón o en las oficinas de turismo de la zona.
Prohibiciones
Además de las restricciones por zonas, existen algunas prohibiciones generales para la pesca en el Río Grío:
- No se permite la pesca durante la noche.
- Se prohíbe el uso de determinados cebos artificiales y naturales.
- Existe un límite diario de capturas por especie.
- Se debe devolver al río las especies en peligro de extinción o que no se encuentren dentro de las tallas mínimas permitidas.
Especies
El Río Grío alberga una gran variedad de especies de peces, entre las que destacan:
- Trucha común: La especie más emblemática del río, con tamaños que oscilan entre los 20 y los 50 cm. Su pesca es relativamente fácil, especialmente con técnicas como la pesca a mosca o el cebado con lombriz.
- Barbo: Un pez luchador y resistente, que puede alcanzar tamaños de hasta 60 cm. Se pesca principalmente con técnicas de fondo, utilizando cebos como maíz o gusanos.
- Madrilla: Una especie pequeña y ágil, que se pesca con técnicas ligeras como la pesca a ultraligero o la pesca con cucharilla.
- Tenca: Un pez de aguas tranquilas, que se pesca con técnicas de fondo utilizando cebos como pasta o boilies.
Técnicas de pesca
Las técnicas de pesca más utilizadas en el Río Grío son:
- Pesca a mosca: Ideal para la pesca de truchas, especialmente en los tramos con corrientes rápidas.
- Pesca a spinning: Una técnica versátil que se puede utilizar para capturar diferentes especies, como truchas, barbos o madrillas.
- Pesca a fondo: Adecuada para la pesca de especies como barbos o tencas en zonas con corrientes lentas.
- Pesca con cebo natural: Se utiliza principalmente para la pesca de barbos y tencas, utilizando cebos como lombriz, maíz o gusanos.
Mejores zonas
El Río Grío ofrece una gran variedad de escenarios para la pesca, desde rápidos y pozas hasta tramos con corrientes más lentas. Algunas de las mejores zonas para pescar son:
- El tramo entre Morata de Jalón y Ateca: Un tramo con abundantes truchas y barbos.
- El coto de Villalba de Perejil: Un coto privado con una gran población de truchas.
- El embalse de La Tranquilla: Un embalse con aguas tranquilas ideal para la pesca de carpas y tencas.
Acceso al río
El Río Grío es un río accesible, con carreteras que lo bordean en gran parte de su recorrido. Existen numerosos puntos de acceso al río, tanto en coche como a pie.
Recomendaciones
- Es importante respetar el medio ambiente y seguir las normas de pesca responsable.
- Se recomienda consultar la normativa vigente antes de iniciar la jornada de pesca.
- Es aconsejable llevar ropa y calzado adecuados para la actividad.
- No se debe olvidar llevar protección solar, gorra y agua potable.
El Río Grío ofrece una experiencia de pesca única en un entorno natural incomparable. Con un poco de planificación y respeto por el medio ambiente, podrás disfrutar de una jornada inolvidable pescando en este paraíso aragonés
